DEBATE NET ZERO: ¿QUIÉN ES RESPONSABLE DE LAS POLÍTICAS CLIMÁTICAS? ¿ESTADO O MERCADO?

En el último debate interno de Unplastify se discutió sobre el video “We debunk the latest climate lie” publicado por The New York Times. El video propone que el objetivo “net zero” de varias corporaciones no es viable debido a 3 razones principales: 

  1. los compromisos presentan plazos demasiado largos

  2. siempre está presente la “letra chica” 

  3. y respaldan los compromisos con tecnología que aún no está disponible o no es aplicable a gran escala. 

En esta oportunidad se sumó Taís Gadea Lara, periodista especialista en cambio climático, quien nos ayudó a contextualizar y poner en perspectiva ciertos temas tratados.


¿Qué es net zero? 

El cambio climático se mide en términos de emisiones de gases de efecto invernadero (GEI). Para simplificar, se habla de emisiones de dióxido de carbono equivalente. A raíz de esto, surge el concepto “net zero”. “Net zero” es cuando una empresa o gobierno remueve las mismas cantidades de estos gases (dióxido de carbono) que emite durante sus actividades. En teoría si todas las empresas y gobiernos lograran esto, el calentamiento global se detendría. 

 

Durante el debate llegamos a tres conclusiones principales:

  • Tanto las corporaciones como los gobiernos hace más de 25 años establecen metas y compromisos para mitigar el cambio climático. Parte del equipo destacó la importancia de poner estos temas en la agenda pública y privada, y que sean temas de conversación que antes no existían. Sin embargo, observamos que estos compromisos se postulan a largo plazo. El problema con los compromisos a largo plazo surge cuando no hay una hoja de ruta que detalle la forma en la que se va a llevar a cabo.  ¿Cuál es el tiempo óptimo para establecer una meta que logre mitigar el cambio climático? Al observar los compromisos que las corporaciones y países vienen realizando notamos que muchas veces se modifican cuestiones puntuales, pero sin embargo son insuficientes en relación a las metas establecidas. El paso del tiempo demuestra que esos compromisos no son más que promesas, sin hoja de ruta, objetivos intermedios, que permitan medir el recorrido, grado de avance, de la compañía en torno a la meta. Tais argumentó que el problema es que los compromisos de las corporaciones se quedan en la meta y no determinan la hoja de ruta. En uno de sus newsletter mencionó que los compromisos… “no tienen un proceso formal de seguimiento, control y cumplimiento que permita la puesta en marcha de las acciones necesarias para alcanzar las metas anunciadas” (RedAcción, 2021). Una forma de evitar que los compromisos sean simples promesas, es que una organización o institución ajena a la empresa, lleve registro y dé a conocer el estado de los compromisos. Existe una iniciativa denominada “Net Zero Tracker” que evalúa 2000 empresas con compromiso Net Zero o Carbono neutralidad (Net Zero Tracker). Crearon un bot de twitter que comunica de forma concreta el estado de los compromisos de cada empresa (Net Zero Check). 

  • Respecto a la responsabilidad de normas y políticas climáticas se presentaron argumentos dispares. Esto generó un debate fructífero en donde permitió el intercambio de varias posturas. Si bien la mayoría estuvo de acuerdo en que tanto el estado como las corporaciones deben trabajar de forma conjunta en el planeamiento y ejecución de normas y  políticas climáticas. También se planteó la idea de que los estados tienen límites, mientras que las corporaciones son transnacionales y no tienen fronteras. Por lo que hay que pensar las políticas climáticas de forma integrada. Un miembro del equipo mencionó la importancia y el rol no solo de las corporaciones, sino también de los mercados en la mitigación del cambio climático, si esos compromisos establecidos por corporaciones se convierten en normas para el mercado, es quien puede determinar políticas climáticas efectivas ya que los gobiernos solo duran solo algunos años. Este tipo de temas, requiere de establecer políticas a largo plazo, con metas y objetivos claros y progresivos.

  • Las empresas deberían recibir incentivos que permitan llevar a cabo los cambios necesarios para cumplir con sus compromisos de Net Zero. Para muchas empresas, la mitigación implica una gran inversión. Durante el debate se propuso la idea de brindar incentivos. Estos incentivos deben estar alineados con la posibilidad de cambiar el modelo de producción y los procesos (si fuera necesario). Es necesario poner en la balanza la idea de costo/beneficio. Hoy en día la inversión en nuevas tecnologías y el intercambio de pensamiento crítico, puede traer beneficios monetarios a futuro. Los miembros del equipo estuvieron de acuerdo en que mitigar es parte de la transición y que los compromisos deben estar diseñados en pos de una transformación real. Para lograr un cambio, es necesario que el cambio sea sistémico.  

Entonces, ¿quién es el responsable de llevar a cabo las políticas climáticas? Se requiere la competencia de varios actores, donde cada uno lleve adelante una estrategia específica que permita alcanzar el objetivo. Estado y mercado -entendiéndose por mercados los oferentes y consumidores- son parte de un rompecabezas. El mercado no tiene fronteras y es necesario integrarlo a las políticas climáticas. El estado es quién debe regular para garantizar el cambio sistémico que se requiere. Con el fatalismo no se llega a ningún lado, es necesario el diálogo y la acción para poder armar un rompecabezas sólido que implemente un plan de acción eficiente frente a la crisis climática que estamos viviendo. 

Estos debates no sólo nos sirven como actividades de distensión dentro del equipo sino que nos permiten conocer otras miradas sobre cada tema que tratamos, enseñándonos que entre todos pueden surgir grandes ideas con las cuales podemos trabajar.

Creemos que la problemática del cambio climático y su abordaje podría ser muy similar a la problemática de la contaminación plástica, se necesita de la colaboración entre actores, alternativas, metas y objetivos claros que resulten en políticas y regulaciones que incentiven a evitar el uso de plásticos descartables y acompañen en esa transición.

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